Capitulo cuatro
Y
suena el despertador, estaba harta de soñar siempre con lo mismo, todos los
días desde hace un buen tiempo tengo el mismo sueño con ese chico. La verdad
tengo miedo nunca consigo escapar…
-Giselle-llama Vicky a la puerta de
mi habitación-¿estás despierta? ¿Puedo pasar?
-¡Si! Puedes pasar Vicky- le
respondo mientras me siento en mi cama.
-Buenos días-me dice con una gran
sonrisa.
-Buenos días, ¿Qué pasa?
-Tenía que decirte una cosa Giselle,
mira me voy durante unas dos semanas no
voy a estar así que me preguntaba si podrías cuidar a mi gato Kasper..
-Oh claro no hay problema, tranquila
estará en buenas manos. ¿Y a dónde te vas?
-Pues me voy una semana a casa de
mis padres hace tiempo que no les veo y bueno la otra semana restante me iré de
vaca-ciones con mi hermana a Argentina. Siempre hemos querido ir-dice
ilusionada.
-Que guay!!! Pues pásatelo bien, te
voy extrañar Vicky.
-Oh yo también Giselle-dice Vicky-si
le pasa algo a Kasper o lo notas raro llevalo al veterinario y cuando vuelva te
devuelvo el dinero ¿si?
-Vale, ¿y cuándo te vas?-le pregunto
con curiosidad.
-Pues ahora mismo
-¿Qué?-le digo sorprendida-Pero esto
lo habías pensado hace tiempo o..
-Pues la verdad lo pensé ayer mismo
por la noche-me dice como si quisiera disculparse- pero como no estabas, pues no
te lo pude decir…
-Bueno me vas a dejar sola en casa,
que palo...-le digo con tristeza.
Finalmente me despedí de mi amiga y me empecé a preparar para ir a
trabajar me esperaba una mañana bastante larga. Que ganas tengo de que lleguen
las seis…
-Bueno Kasper ahora solo estaremos
tu y yo solitos en casa- esto es algo estupido hablar con un gato..
La mañana se me paso más lenta de lo normal, ¿sería por que era mi
último día de trabajo? O porque…dios estaba muerta en cuanto llegue a casa lo
primero que hice fue darme una buena ducha y prepararme algo de comer.
Ya
eran las cinco llevaba un buen rato pensando que ponerme, nunca me había
costado tanto decidirme finalmente escogí unos pantalones negros pitillos y una
camiseta sin tirantes morada y unos tacones como no…
Salí
de casa temprano así que decidí ir despacio cuando llegue me lo encontré
apoyado en la pared junto a la cafetería con unos pitillos negros rotos una
camiseta blanca y un chaleco negro estaba genial…
-Hey Giselle-me dice con una gran
sonrisa-¿qué tal?
-Hola muy bien y tú-se acerca y me
da dos besos.
-Genial.
-Bueno ¿y a dónde vamos a ir? -le
pregunto con curiosidad.
-Mmmh te quería hacer una pregunta..
-Adelante, pregunta- me mira con
cara pensativa.
-¿Ya conoces Hollywood?
-Pues si te soy sincera no, no he
visto ni la mitad de la ciudad, no he
tenido mucho tiempo…
-Perfecto. Entonces debo informarte
que tienes a un guía que esta dispuesto a hacerte un tour especial por toda la
ciudad..
-Estupendo, y bien ¿por dónde
empezamos?
La tarde fue transcurriendo genial me llevo a sitios que nunca había ido,
nos lo pasamos genial y nos sacamos bastantes fotos yo me cambie de zapatos
menos mal que llevaba unas manoletinas en el bolso por que si no me moriría con
todo lo que andamos. Cuando llegamos al famoso letrero que pone HOLLYWOOD nos
llevamos una gran sorpresa no se podía pasar. Y entonces Andy me propuso
subamos a verlo y yo le insistí que era una mala idea porque decía en el cartel
que había vigilante pero termino convenciendo. Me tuvo que ayudar a subir
porque el terreno era muy desigual y era resbaladizo. Desde ahí arriba había
unas vistas de la ciudad alucinantes…
Ahora
mismo Andy me había ganado en una partida al futbolín y yo le estaba pidiendo
la revancha pero el me dijo que volvería a perder ya que era muy bueno y me
dijo que vayamos a la feria…
-¿Qué tal te lo estas pasando?
-Fenomenal, esto es como los viejos
tiempos ¿no crees?
-Pues tienes razón Giselle-me sonríe
y me dice- hey ¿nos montamos en esa atracción?
-Emm..
-Venga no me digas que tienes miedo,
estas conmigo no te va a pasar nada..
-Pues si va muy rápido… No prefieres
que nos metamos en la casa del terror…
-Venga Giselle yo te agarrare de la
mano-me mira con ojitos de niño bueno.
-Esta bien…-como resistirse a esa
mirada y decirle que no, ¡es imposible!
Nos montamos y al principio lo pase mal porque no estaba acostumbrada a
montarme en atracciones tan fuertes no paraba de dar vueltas y vueltas…pero
luego estuvo genial. También nos montamos en la noria, donde había unas vistas
estupendas y cuando nos bajamos Andy me consiguió un oso de peluche que era muy
mono.
-Andy, muchas gracias por el
peluche-me acerco y le abrazo.
-De nada, ¿te gusta el algodón de
azúcar?
-Si me encanta.
-Entonces a por ellos, golosa.
-Gracias Andy- esto es genial es
realmente como los viejos tiempos no ha cambiado sigue siendo igual- Te
recuerdo que tu también eres un
goloso.
-Ya, me encantan las cosas dulces
como ..-se calla y recapacita lo que iba a decir y entonces..-Oh mierda se me
ha caído el maldito algodón. ¡Que torpe soy!
-Bueno no pasa nada, ¿quieres del
mío?
-Si-se acerca.
-Pues no te voy a dar- me alejo de
el y me mira con cara de asombro.
-Eres mala-pone cara de enfadado.
-Jajajaja es broma toma coge- se
acerca y empieza a comer.
-Mmmh el tuyo esta mucho mejor que
el mío…
-Pero que dices si es lo mismo- me
empiezo a reír y entonces se acerca y se queda mirándome fijamente a la cara
cada vez si iba acercando más y yo me estaba poniendo colorada y entonces
acerca su mano a mi cara y..
-Tenías una pestaña ..
-Oh gracias por quitármela- le
sonrío.
-Te has puesto colorada..-me echa
una mirada picara-¿Es qué te he puesto nerviosa?
-No, es solo que…tengo calor.
-Mmmh ¿tienes calor?-me pregunta
levantando una ceja.
-Sí,¿tú no tienes calor?-me dirijo
hacia los puestos para evitar mirarle a los ojos.
-Hey que te parece si vamos a cenar
algo tengo mucha hambre
-Esta bien glotón.
Fuimos a cenar a una pizzería, había sido un día estupendo me lo había
pasado genial pero ya era tarde y me acompaño a casa. Durante el camino
estuvimos hablando sobre lo torpe que era el camarero que nos atendió en la
pizzería era muy gracioso.
-Bueno pues ya estamos, en este
edificio vivo.
-Giselle debo decirte que me lo he
pasado muy bien.
-Yo también me lo he pasado muy
bien, esto hay que repetirlo ¿no crees?
-Cuando quieras. Todavía hay muchas
cosas que tienes que ver. Sabes pensé que las cosas no serían como antes porque
ha pasado mucho tiempo pero sigues siendo
la misma.
-Sí todo es como antes. Bueno
pues…nos vemos cuando quieras-le abrazo-Gracias por acompañarme.
-Buenas noches Giselle, nos vemos.
-Buenas noches.
Llevaba
mucho tiempo sin pasármelo tan bien. En cuanto entre en casa me cambie y me
puse mi pijama me quite el maquillaje y me tumbe en la cama estaba muerta hoy
había sido un día agotador y necesitaba dormir en cuanto cerré los ojos caí
rendida y me dormí.
f
En
cuanto deje a Giselle en su casa me fui a dar una vuelta ya que no tenía sueño,
vague por las calles sin rumbo alguno mientas me fumaba un cigarro pero
entonces…
-Hola preciosa, ¿qué hace una chica
tan hermosa por aquí a estas horas sola?
-Jack por favor déjame en paz esta
noche no quiero compañía.
-Pero si la última vez nos lo pasamos genial-le agarra por el brazo y la
mete en el callejón- A demás me siento muy solo…
-Enserio no estoy de humor, vete a
hincarle el diente a otra o una colmillera.
-Rebeca me lo debes, si no recuerdo
mal me deshice de tu prometido y ahora estas libre gracias a mí.
-Sí pero yo no te pedí que te lo
cargaras-le dice elevando el tono-solo te pedí que me ayudases a no casarme con ese pelmazo.
-Y eso es lo que hice ¿no?-le dice
con tono irónico- nos lo pasaremos bien..
-No y punto.
-No tu vas a hacer lo que yo te
diga-le dice cabreado.
-Pero tú que te crees-se oyen
gruñidos.
-Esta bien, ya te arrepentirás…
En cuanto salió del callejón Jack fingí hablar por teléfono y me fui
alejando. Caminé lo más rápido posible hacia casa de Jake. Tenía que contarle
lo que había visto esto no pintaba nada bien..
-Que pasa tío-me dice
sorprendido-¿hoy no tenías una cita?
-Sí pero mi cita ya se fue a casa,
recuerda que no es una vampira y necesita dormir. Lo siento si te molesto pasándome a estas horas pero me he
enterado de una cosa y no te va a gustar nada…
-¿Qué pasa?-pregunta con tono
preocupado.
-Adivina quién esta en la ciudad.
-No se ¿Bob Marley?
-No enserio tío no estoy de coña-le
digo muy seriamente-A parte Bob Marley esta muerto..
-Vale lo siento-me dice mientras se
tumba en el sofá- Siéntate tío, ¿quieres
algo de beber?
-No. Jack esta en la ciudad
-¡¡QUE!!!!-dice pegando un brinco
del sofá-¿Estás de coña verdad?
-Me ves con cara de estar
bromeando-le miro con cara de preocupación.
-Joder, joder, joder…-no para de ir
de un sitio a otro-Ese tío nunca trae nada
bueno, es como el diablo en persona..
-Ya lo se, por eso cuando me he
enterado he venido directo aquí..
-Y ¿dónde lo has visto?
-Lo he visto ahora mismo por el
centro hablando con una vampira..
-¿De qué hablaban?-me pregunta
frustrado.
-No nada peligroso solo quería
compañía..
-Ese tío es la ostia, hay que
adivinar que hace aquí-me dice seriamente-No creo que tenga buenas intenciones…
-Ya, me encantaría saber que hace
pero tal vez lo mejor sea que no nos metamos dónde no nos llaman. Nos puede
causar muchos problemas.
-Tienes razón pero-hace una
pausa-Tal vez solo haya venido aquí por la fiesta.
-Mira este sitio antes era tranquilo
pero últimamente han llegado muchos vampiros nuevos a esta ciudad y que este
engendro este aquí no pinta nada bien.
-Bueno tenemos que mantenernos
alejados de él si no queremos acabar
muertos.
-Ya..
-De todas formas investigare un poco
haber si alguien sabe algo no pienso meterme en el asunto muy a fondo-saca una cerveza
de la nevera y bebe un buen trago-Igual esta en busca del libro. Bah no creo es
un niño mimado para que se va a
interesar en esas cosas.
-Vale tío, pero ten cuidado-le digo
seriamente- Bueno me piro.
-Sayonara idiota-me da un empujón.
-Que te den gilipollas-le saco el
dedo del medio y me voy, siempre nos tratábamos de esa manera tan amistosa…
f
Me desperté con el ronroneo del gato de Vicky, estaba tumbado en mi
almohada observándome.-Buenos días Kasper ¿hechas de menos a Vicky?-Me levantó
y voy a llenarle el comedero y a cambiarle el agua.-Hey bonito tenías hambre
ehh-le acaricio mientras come y no para de ronronear.- ¿Sabes que pequeñajo? Me
recuerdas a un gato que tuve cuando era pequeña, tenía los mismos ojos que tú.
Lastima que un día se escapo de casa.-Agg tengo que dejar a un lado la manía
que tengo de hablar con los gatos.
Me
prepare mi tazón de leche con cereales de chocolate y me senté en el sofá y
mientras desayunaba me puse a ver la tele. Cuando termine me vestí y le envíe
un mensaje a Sammi y a Jessica para quedar..
-Hola Jessica-me acerco y le doy dos
besos-¿Qué tal?
-Hola cariño, muy bien y ¿tu?-me
dice con una gran sonrisa.
-Me alegro, bien bien-le miro y le
pregunto-¿y esa sonrisa?
-Pues que soy la chica mas
afortunada del planeta.
-¿Y eso?-la miro con curiosidad.
-Pues mi chico me ha enviado rosas y
bombones es más romántico..-me dice con una sonrisa tonta.
-Oh que bonito pero no pongas esa
cara que pareces tontita.
-Calla!! Esto es amor Giselle-me
dice-Oye y está tardona ¿dónde se ha metido?
-Tu misma lo has dicho, esta
tardona-le contesto-ya sabes siempre llega tarde.
-No, lo normal es que lleguéis las
dos tarde..-me mira-y tu la que más.
-No será que tu llegas siempre
demasiado pronto.
-Lo siento se me ha hecho tarde-nos
dice Sammi-Es que había un tráfico…
-Bueno no pasa nada-decimos a la vez
Jessica y yo y nos reímos.
-Venga las tiendas nos esperan…-les
digo.
-Si y hace tiempo que nos
esperan-dice Sammi-¿Hace cuánto tiempo
que no vamos de compras?
-Puff, no se ¿tres semanas?-le
respondo.
-Buah eso es mucho chicas venga las
tiendas me llaman-dice Sammi pegando saltitos.
-Jajajajaja que graciosa Sammi, enserio
no he conocido a nadie que disfrute tanto comprando ropa-dice Jessica sin parar
de reirse.
Nos pasamos toda la mañana en el centro comercial, había un montón de
tiendas y acabamos derrotadas. Me compre un montón de ropa. Que puedo decir soy
una chica y no me puedo resistir a decir que no cuando voy de compras me
encanta la ropa. Y los zapatos como no con mucho tacón y la ropa interior de
encaje. Finalmente nos sentamos en una cafetería para descansar un poco y
tomarnos algo.
Cuando
llegue a casa guarde toda mi ropa nueva me asegure de que Kasper estaría bien y
me marche a comer con Sammi ya que Jessica había quedado con su novio para
comer.
Fuimos
a comer a un restaurante de comida italiana y cuando terminamos dimos una
vuelta y hablamos sobre el cumpleaños de Jessica. Habíamos pensado hacerle una
fiesta sorpresa. Yo me encargaría de buscar un local y ella de la lista de
invitados y la comida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario