Ya llevábamos un día de viaje en coche. Íbamos a
ciento ochenta kilómetros por hora para llegar lo antes posible. Tomamos varios
atajos pasando dónde no había radares. Una vez nos paro un policía. pero gracias
a que somos vampiros le hipnotizamos y le hicimos olvidar que nos había visto.
Faltaba un par de horas para llegar a nuestro destino y mi mejor amigo ya se
estaba desesperando. Se que es su novia y que esta muy preocupado pero tiene
que relajarse porque sino no le saldrá nada bien. Sammi en cambio esta más
calmada.
Me pregunto que estará haciendo Giselle en estos
momentos. Espero que Jack no la este acechando, tenía que haber llamado a
alguien para que la vigile. En cuanto hagamos una parada avisaré a mi amigo Joe
para que le eche un vistazo.
En cuanto llegamos a la ciudad recorrimos unos
cuantos hostales que había mirado desde
su ordenador, pero cuando nos quedó uno todas nuestras esperanzas casi se habían
desmoronado, porque si no se ha hospedado en ese no teníamos ni idea dónde
habría estado, pero por suerte si estaba hospedada en ese aunque no nos dijo en
que habitación estaba cómo era pequeño nos colamos y rastreamos el lugar hasta
que dimos con su habitación. Lo que más nos extraño es que no había echo ningún
conjuro para evitar que entrasen otros vampiros.
Cuando entramos en la habitación las camas estaban
hechas, y por lo que pudimos deducir casi ni habían pasado tiempo en ella.
-¿Y
ahora qué? No están ni parece que hayan estado aunque estén sus cosas-dice
Sammi.
-Tenemos
que esperar a qué habrán Blood Spirit e investigaremos. Preguntaremos si las han visto.
-Sí
pero si metemos la pata y preguntamos a quién no debíamos preguntar podríamos meternos en un gran lío.
-Andaremos
con cuidado-dice Jake. Nunca le había visto tan frustrado pero
es lo que
hace el amor. Por fin ha encontrado a una chica que ama y esta en peligro.
-Deberíamos
descansar-dice Sammi.
-Vayamos
a por nuestras cosas y a nuestras habitaciones-les digo.
Nunca había conseguido dormirme tan rápido,
realmente necesitaba dormir tras tantas horas al volante. Me di una ducha fría
y me prepare para salir.
Llaman a la puerta y me dirijo para abrirla.
-¿Estás
listo?-me pregunta Sammi.
-Sí.
-Jake
nos esta esperando fuera. ¿Llevas armas?
-Si
un par de cuchillos de plata no me hace falta nada más.
-Oye
¿crees qué ella estará bien?-me pregunta.
-No
lo sé. No sabemos cómo es ese tal Drake-le digo. Por esta razón es por lo que no
quiero meterme en los rollos del consejo te mandan hacer trabajos muy
peligrosos aunque te pagan bien. Es mejor permanecer en la sombra sin intervenir
si no quieres problemas. –Se me olvidaba voy a llamar a Joe para que le eche un
vistazo de vez en cuando a Giselle.
Llamé a Joe y le di la dirección de la casa de
Giselle. Solo tenía que asegurarse de que no salía de casa por las noches y
evitar que Jack haga alguna locura. Cómo me debía un favor con que la
protegiese mientras no esté allá me vale.
f
Ya habíamos llegado a Texas y estábamos buscando el
hostal dónde se hospedaba hasta que justo cuando íbamos a entrar a uno nos
escondimos corriendo porque les habíamos visto.
-Mierda,
están aquí. Eso significa que Jessica ha estado aquí-me dice.
-Cómo
nos hayan visto me da algo-le digo. Seguro que me mata si se entera que no he
hecho lo que supuestamente le prometí.
-Será
mejor que permanezcamos aquí hasta que se vayan. Lo malo es que nos pueden
oler-me dice Vicky.
-Shhh.
Creo que han salido-le digo. Estábamos detrás de unos contenedores, el olor a
basura nos salvara. Estuvimos unos cinco minutos escondidas sin hacer ruido
para asegurarnos que ya estaban lejos. No se llevaron sus coches porque estaban
aparcados en la cera de enfrente.
-Ya
estarán lejos, tenemos que ir al Blood Spirit.
-Sí,
pero seguramente ellos se dirigen hacia allá y nos pueden reconocer.
-Ya
lo se por eso cogí un par de pelucas que tenía en el armario-me dice Vicky.
-¿Pero
parecen de verdad?-le pregunto.
-Sí
ahora vayamos a buscar un hostal para dormir y pasar la noche.
-¿Qué
tal si vamos a ese que estaba a una
manzana de aquí?-le digo.
Media hora más tarde ya estaba lista. Me había
puesto un vestido corto con volantes con bastante escote y una chaqueta de
cuero cortita con unos pequeños bolsillos internos dónde había guardado la
pistola de agua bendita. También debajo del vestido llevaba un cinturón
especial dónde coloque el cuchillo y la pistola. Menos mal que había escogido
un vestido de volantes, porque las armas abultaban un poco.
Estábamos de camino hacia el loca tuvimos que
preguntar dónde estaba ya que no nos aclarábamos con el mapa. Parecía una
ciudad tranquila aunque las apariencias engañan porque esta infestada de
vampiros.
-Ya
hemos llegado-me dice Vicky.
-Estoy
nerviosa ¿de verdad me queda bien el rubio?-le pregunto.
-Sí
menos mal que llevaba unas extensiones negras porque sino quedaría algo raro con
tus cejas pero ahora parece muy real. Pareces una barbie roquera-me dice
riéndose.
-Vamos
allá, entremos-le digo y me coge de la mano nerviosa. El local era enorme y
estaba petado de gente. Tenía las paredes negras y había una pista de baile
enorme con un montón de luces y la música estaba a tope.-¿Por dónde empezamos?
-Podemos
hacernos alguna amiga y haber que nos cuentan sobre ese tal Drake.
Estuvimos un buen rato hasta que encontramos a un
par de chicas que parecían inofensivas. En cuanto a lo de inofensivas me
refiero a que no parecen unas vampiras peligrosas porque el local estaba
infestado de vampiros.
-Hola
chicas-dice Vicky con una gran sonrisa.
-Hola,
¿sois nuevas por aquí?-nos pregunta una de ellas. Era muy guapa. Tenía el pelo
liso, castaño oscuro largo hasta la cintura. No era muy alta pero tampoco muy
baja mediría aproximadamente un metro sesenta, era bastante pálida con unos
grandes ojos marrones.
-Sí,
hemos venido a visitar a unos parientes y hemos decidido salir un poco para ver
que tal era el ambiente por aquí-le digo.
-Way,
por cierto me llamo Scarlet y está es mi amiga Courtney ¿y vosotras?-En cambio
Courtney era muy alta con el pelo rubio hasta los hombros y tenía la piel
bastante bronceada.
-Yo
me llamo Jenny-le digo. Es mejor que no de mi verda-dero nombre por si a caso.
-Y
yo soy Lu-le dice Vicky. En cuanto dice eso se le quedan mirando extrañadas.
Enserio Lu no se le podía ocurrir otra cosa mejor.- O sea, Lu es un diminutivo
es que no me gusta mi verdadero nombre que es Lucy.
-Dicen
que el dueño de este club es guapísimo ¿es eso verdad?-le pregunta Vicky a
Scarlet.
-No
te voy a negar que sea guapo pero no os recomiendo que os acerquéis a él-nos
dice Scarlet.
-¿Por?-pregunta
Vicky.
-Es
un mujeriego y no tenéis pinta de ser unas colmilleras así que no os lo
recomiendo.
-Scarlet
ahora vengo voy a por algo de beber, hasta ahora chicas-dice su amiga y se
aleja entre la multitud.
-Tú
cara me suena pero no se de que, me resultas muy familiar-le dice Scarlet a
Vicky.
-Igual
has visto a mi hermana mayor, ha estado por aquí-le dice.
-¿Cómo
se llama? Puede que la conozca.
-Rose.
-¿Rose
Harrison?
-Sí,
esa misma.
-Vale
muy bien ¿quiénes sois?-nos pregunta muy seria. Creo que hemos metido la pata.
Puede ser alguna amiguita de ese tal
Drake.
-¿Has
visto a Rose aquí? Estuvo hace unos tres días con una chica alta de pelo negro
y mechas azules.
-No
habéis respondido a mi pregunta-nos dice.
-Vale
te hemos mentido. Yo me llamo Vicky y esta es
Giselle-en cuanto dice eso le doy un golpe con el codo. Podría ser peligrosa.
-Hemos
venido a buscarlas, vinieron aquí y parece que han desaparecido tienen el móvil
apagado y no están en sus habitaciones-le digo.
-Vale
me fiaré de vosotras. La última vez que las vi fue exactamente hace unos tres
días nos reunimos para hablar supongo
que ya sabréis que venían en busca del libro ¿no?
-Sí-le
decimos.
-Intercambiamos
algo de información y estábamos juntas en esto. Lo último que se es que
estuvieron hablando con Drake durante un rato aquí y luego nos colamos en su
casa, pero entonces nos pillaron pero conseguimos escapar nos separamos pero no
volvieron a nuestro punto de encuentro. Llevo buscándolas desde entonces pero
no he tenido suerte. No se si están en la casa de Drake, porque no he conseguido entrar ya que desde que nos colamos hay mucha más vigilancia. Puede qué
las haya traído aquí pero es muy difícil
conseguir entrar en la zona Vip o hablar con el en persona desde entonces. Por lo que me he podido enterar va a celebrar una fiesta
en su casa dentro de un par de días
es la única manera de conseguir entrar a
la mansión y ver si están ahí. Pero el libro ya no seguirá en el mismo lugar. Conseguimos cogerlo pero
por si acaso arrancamos las hojas y nos
las repartimos para que si lograran
pillarnos no conseguirían el libro completo. Pero las cosas salieron mal.
-Pero
¿has avisado a El Consejo de lo sucedido?-le pregunta Vicky.
-No,
porque hay infiltrados y hay familiares de Drake que trabajan allí lo
defenderían a toda costa.
-Vaya
mierda y ¿qué haces por aquí?
-Pues
estoy con mi amiga intentando descubrir algo. Hasta ahora eso es todo lo que sabemos
y puede que Drake este formando una conspiración para acabar con El Consejo.
Con ese libro puede hacer mucho daño y le proporcionará mucho poder.
-Nosotras
hemos venido en busca de mi hermana y nuestra amiga pero esto es más peligroso
de lo que pensaba-dice Vicky.
-Sois
humanas no deberíais meteros en todo esto podríais acabar mal.
-Nos
da igual. Ellas nos importan-le digo.
-Me
tengo que ir a investigar ¿qué os parece si quedamos mañana por la tarde para
charlar un rato?
-Perfecto,
¿me das tú número?-le pregunto.
Ya habíamos conseguido algo de información y nos
habíamos hecho una nueva amiga que nos ha podido dar un montón de información.
Aunque por lo que he podido ver no se si podremos hacer mucha cosa todo esto es
muy peligroso.
-Vamos
a ver si conseguimos algo más de información. Creo que ese debe de ser Drake
porque esta rodeado de un montón de personas y tiene guardaespaldas-me dice
Vicky.
-Oh
oh.
-¿Qué
pasa?-me pregunta.
-He
visto a Andy.
-Pero
¿te ha reconocido?-me dice Vicky mientras caminamos entre la multitud.
-No
creo. Anda vamos a tomar algo-le digo. Nos dirigimos hacia la barra y pedimos
algo de beber. Entonces me giro y Andy
esta alado mío.
-Hola
preciosa ¿puedo invitarte a algo de beber?-me dice y miró hacia otro lado.
-No
hace falta ya he pedido algo-le digo cambiando algo la voz.
-Que
pena, ¿cómo te llamas?
-Jenny-le
digo. Cojo mi bebida y me voy con Vicky. Nos alejamos y nos sentamos en una
esquina del local. Dónde no hay
mucha gente porque están en la pista de baile.
-No
te ha conocido y estaba flirteando contigo.
-No
creo. Ha sido muy raro. No le he mirado a los ojos. ¿y sí me estaba tomando el
pelo para ver cómo reaccionaba?-le
digo frustrada.
Pasado un rato veo cómo se acerca.
-Estás
aquí. Antes te has ido muy rápido y no he tenido tiempo de presentarme. Me
llamo Andy-me dice y se me queda mirando a los ojos.
-Nos
deben de estar esperando los chicos Jenny, vayámonos-me dice Vicky para
intentar quitármelo de encima
pero él me coge del brazo y me estampa contra la pared.
-Tú
no vas a ningún sitio-me dice y pone los brazos a ambos lados de la pared para
que no me pueda ir. Se perfectamente
que es Andy y por una vez en la vida desee que sería Jack pero no.-Así que te
llamas Jenny-me dice y me toca el pelo.
-Suelta
a mi amiga-le dice Vicky.
-Calla-le
grita. Cuando se enfada Andy no es muy agradable de ver y se perfectamente que
sabe que soy Giselle me va a matar.-Giselle ¿cómo coño tengo qué hablar
contigo?-me grita y me quita la peluca de un tirón.
-¿Pero
qué…-le intento empujar pero es como si tuviera a una roca delante de mí.
-¿Sabes
en el peligro que te acabas de exponer?-me grita más furioso aún.
-No
me grites y apártate no quiero hablar contigo.
-Me
tienes harto. Nunca me haces caso yo hago todo lo que puedo para protegerte
pero todo lo que hago no sirve para nada
si no me haces caso.
-Me
has tratado como una cría y ya soy mayor puedo hacer lo que quiera la vida de
mi mejor amiga esta en juego y no pienso quedarme en casa sentada en el sofá
esperando tener alguna noticia-le grito.
-Despierta-me
dice y pone sus manos en mis hombros y empieza a sacudirme- Reacciona vuelve a
la vida real este no es tú mundo. Te podrían matar en un momento, eres un aperitivo
para ellos.
-Te
odio-le digo y le doy un tortazo. Entonces me coge de la mano y me saca fuera
del local.
-Tú
te vienes conmigo.
-Yo
no voy a ningún sitio contigo-le grito.
-Joder
que no-me dice y me intenta llevar a rastras pero me resisto entonces me coge y
me lleva en su hombro.
-Suéltame
idiota-le digo y empiezo a pegarle patadas y puñetazos pero me agarra las
piernas de tal forma que no puedo moverlas pero aun así sigo pegándole
puñetazos.
-
Te estas comportando como una niña pequeña y estas perdiendo el tiempo sabes
perfectamente que no me haces daño.
-Como
no me sueltes voy a empezar a chillar.
-Adelante,
pero lo vas a lamentar-me dice. Sabe perfectamente que soy incapaz de ponerle
en evidencia y eso le enfadaría mucho. Finalmente me canse de tanto insistir y
cuando llegamos a la habitación de su hostal me dejo en la cama y cerro la puerta. Entonces intento quitarle la llave.- Para, deja de
hacer el tonto. Por favor-me dice mientras lo sigo
intentando pero me estampa contra la pared otra vez, esto empezaba a ser
doloroso.
-Suéltame,
ya me estoy hartando no quiero estar aquí-le digo y sigo resistiéndome pero
entonces me besa.
-Por
favor, no hagas esto más difícil-me dice sin alejarse a penas de mí, nuestros
labios estaban rozando.
-Yo
no..-no consigo terminar de hablar porque vuelve a besarme. Me rodea con sus
brazos mientras me besa y acabamos en la cama besándonos sin parar, pero
entonces noto como algo me rodea la
muñeca y se oye un “chak”.
-Lo
siento-me dice alejándose. Me había esposado en la cama.
-Serás...-le
digo tirando pero solo consigo hacerme daño.-Suéltame ahora mismo.
-Giselle
no tenía otra opción, lo siento de veras-me dice y sale de la habitación. No me
lo podía creer, me había engañado
como he podido caer en semejante trampa he sido una completa idiota. Todo ha
sido tan rápido.
Cinco minutos después Andy volvió.
-Vicky
esta bien y sabe que estás conmigo traerá tus cosas aquí y le he reservado una
habitación en este hostal-me dice pero yo le ignoro.-Giselle no te enfades
conmigo solo hago lo mejor para ti.
-Sí
claro-le digo y me siento. Entonces saco el cuchillo,
-¿De
dónde has sacado eso?-me pregunta.
-Si
pensabas que no iba armada estas muy equivocado-le digo y le tiro la pistola y
el cuchillo. No me sirve de nada porque sería incapaz de utilizarlos contra él.
Y tampoco podría escapar porque me encontraría.
-Ya
sabía que ibas armada Vicky me lo advirtió por si se te ocurría hacer alguna
locura.
-¿Por
qué no me las has quitado?
-Estaba
esperando a que las sacases para ver lo que ibas a hacer-me dice y se sienta alado
mío. Me coge de la mano y me la acaricia pero yo la aparto. Giselle no te
enfades conmigo. Yo solo trato protegerte.
-¡Qué
te den! Sabias que al besarme cedería porque…-no pude terminar lo que iba a
decir.
-No
tenía otra alternativa.
-¿Por
qué te preocupo tanto? Me tratas como una cría yo también puedo ayudar es más
seguramente he conseguido mucha
más información que vosotros-le digo
agarrando el barrote dónde esta la otra parte de la esposa.
-Solo
quiero protegerte-me dice y se arrodilla en frente mío para poder mirarme a la
cara.- Te voy a soltar pero con una
condición. No cometas ninguna locura por favor-me dice y me suelta las esposas.
–Por tu bien vas a dormir conmigo.
-Sí
claro o por capricho. ¡Soy cómo una muñeca para ti, haces conmigo lo que te da la
gana sinvergüenza!-le digo y cruzo los
brazos. Se levanta del suelo y se dirige hacia la ventana. Saca un cigarrillo y
se pone a fumar. Odio cuando fuma. no soporto el maldito olor a tabaco.
-A
veces llegas a ser tan cabezona-me dice sin apartar la vista de mí.
-Lo
mismo te digo-le digo acercándome a él. Había dejado el paquete de tabaco en
una mesa que había junto a la ventana y
se lo quite. No pensaba soportar como fumaba estando en la misma
habitación.
Si me tengo que fastidiar yo el también.
-Dame
eso ahora mismo-me dice con total tranquilidad.
-No-le
digo y me lo meto en el sujetador.- Sí lo quieres ya sabes dónde esta y como me
toques de descuartizo.
-Joder-dice
acercándose poco a poco a mí.- ¿Por qué eres así conmigo? Lo único que haces es causarme
problemas deja de comportante como una cría y dame mi puto paquete de tabaco.
-No
te lo pienso dar-le digo y entonces se abalanza sobre mí y me tira en la cama. Se pone encima de mí y
me coge de las muñecas.-No me pienso mover de aquí hasta que no decidas dármelo.
-Pues
ya te puedes quedar ahí todo el tiempo que quieras porque no pienso
devolvértelo.
-¿De
veras?-me dice y empieza a acercarse cada ves más hasta que esta a unos pocos
centímetros de mí cara. Se me queda
mirando seriamente y hace un momento un pequeño destello
rojo apareció en sus ojos. Estaba muy enfadado
después de todos los problemas que le había causado. Seguramente si llega a ser
otro vampiro ya estaría muerta pero Andy tiene mucha paciencia.
-Sí-le
digo y entonces llaman a la puerta y suelta un gruñido.
-Esto
no ha acabado aún-me dice y se dirige hacia la puerta. Era Vicky que traía mis
cosas. Andy salió fuera y cerró la puerta. Estuvieron hablando durante unos
minutos y luego entró con mis cosas y las dejo en una esquina. Luego me fulmino
con la mirada y se dirigía hacia mí pero yo me levante de la cama y fui
corriendo para encerrarme en el baño pero me pillo antes de que llegase a
tiempo.
-¿Es
qué no aguantas sin fumar?
-Sí
que aguanto. Lo que no aguanto es que te comportes así-me dice arrinconándome
en una esquina.
-Pues
yo tampoco aguanto que me trates así-le digo y puedo notar desesperación en su
mirada.
-Estamos
empatados-le digo y le abrazo. Odio cuando se pone así. Los dos somos muy
cabezones pero es que es mi amiga
Jessica y quiero ayudar pero él se preocupa demasiado por mí y nunca se lo he agradecido. Siempre estoy volviéndolo loco.
-Hagamos
todo esto más fácil. No lo compliquemos más. Si seguimos así lo único que vamos
hacer es estropear nuestra amistad-me dice y me besa la frente. Odio cuando
hace eso, me hace sentirme como una
niña pequeña.
-Lo
siento, siempre te estoy causando problemas no tienes porque hacer todo esto.
Siempre estas protegiéndome y yo no
hago nunca nada a cambio.
-No
tienes por que hacer nada, con que tu estés bien me conformo-le suelto y me
siento en la cama.
-Algún
día tendré que hacer algo para poder compensar todo lo que estas haciendo por
mí.
-Ese
día podría ser hoy ¿qué tal si me devuelves mi cajetilla de tabaco?
-No.
-¿Por
qué? Eres mala-me dice haciendo pucheritos alado mío.
-Bueno
al menos tienen buena compañía mis cigarrillos.
-Serás
cerdo-le digo y le pego un puñetazo en el pecho.
-Te
gusta pegarme eehh.
-Y
a ti te gusta estamparme en la pared.
-No
es verdad.
-Joder
que no.
-Bueno
no lo hago intencionadamente. Es que me pones de los nervios y no se que hacer
me desesperas-me confiesa.
-Me
gusta más lo que viene después de estamparme en la pared por si no sabes que
hacer-le digo y me fulmina con la mirada.
-Haré
como si no hubiera escuchado nada.
-Idiota.
Voy a cambiarme. Espero que ahora me dejes
entrar al baño-le digo y él asiente. Cojo mi mochila y antes de cerrar la
puerta le lanzo el paquete de tabaco y lo coge en el aire sin a penas moverse.
Reflejos de vampiros, como no.
f
A pesar de que Giselle no me hiciese caso, como
siempre terminábamos estando como siendo. Después de una buena discusión todo
volvía a la normalidad. Los dos teníamos unas personalidades muy fuertes y en
ocasiones explotamos a la vez. Pero como ya dije ella es mi gran debilidad. Al
menos ahora esta junto a mí y no tengo que estar preocupándome por si esta bien
o no. Pero es una carga más que tengo que soportar. Porque si tengo que elegir
entre Jessica y Giselle esta claro que salvaría a Giselle y se que mi Jake
nunca me lo perdonaría. Pero por esa misma razón no quiero tenerla a mi lado en
estas situaciones. Pero espero que no
lleguemos a eso.
-Tío
¿qué tal?-me pregunta Jake.
-Bien
¿y tú?-le digo. Se que es una pregunta algo estúpida porque se que no esta bien
pero no se me ocurría nada que decir.
-Tirando,
¿sigue durmiendo?-me dice y hace una seña
indicando la habitación dónde esta
Giselle.
-Sí,
ayer volvimos a discutir pero lo arreglamos. Se expuso a un gran peligro
viniendo hasta aquí. Es muy cabezona.
-Como
tú tío-me dice mientras se enciende un cigarrillo.
-Ya
lo se. Te doy un consejo nunca esposes a una chica con la que estas discutiendo
se pone aún peor-le digo mientras le
doy una calada a mi cigarro.
-¿La
esposaste?-me pregunta asombrado.
-Sí.
La tuve que llevar a rastras hasta el motel y luego intento escapar pero no
paraba quieta así que le bese para calmarla un poco y luego la espose.
-Joder
tío. No deberías hacer eso. Seguramente heriste sus sentimientos.
-Pero
no tenía otra opción. ¿Qué vamos a hacer hoy?-le pregunto para cambiar de tema.
Hasta ahora no me había dado cuenta de que tal vez había herido sus
sentimientos por que la engañé.
Tenía que haber intentado otra cosa.
-No
lo sé. Ayer no conseguimos nada de información.
-Se
ha levantado será mejor que le abra la puerta por si quiere salir porque si la
tengo encerrada se enfadará.
-Nos
vemos en media en la cafetería de ahí-me dice
señalándola con el dedo.
Cuando entre me la encontré sentada viendo la
televisión. Llevaba unas medias de encaje con unos pantalones cortos negros y
una camiseta negra. Era imposible apartar la mirada de ella cuando la tenías
cerca. Su olor, el olor de su sangre era cautivador como una droga. Él día que
probé su sangre por accidente tenía un impulso por morderla increíble pero me
contuve. Entiendo la razón por la que tantos vampiros desean tomar la sangre de
los media luna es como la droga para los humanos, una vez que la toman no
quieren parar. Parecía una vampira pero
no lo es. Nos parecemos tanto tenemos el pelo negro somos igual de pálidos y
los ojos claros. Somos como dos gotas de agua nos gustan las mismas cosas pero
no estamos predestinados a estar juntos porque ella es humana y yo soy un
vampiro. Muchas veces cuando estábamos en Ohio pensaba en que si sería humano
seguramente le pediría salir pero todo eso eran fantasías.
-Buenos
días-le digo y me sonríe.
-Buenos
días Andy.
-¿Tienes
hambre?
-Pues
sí.
-Dentro
de media hora he quedado con Jake en la cafetería que esta aquí en frente ¿quieres
avisar a Sammi y a Vicky para que vayamos juntos a desayunar?-le digo.
-Claro,
me pongo las botas y voy a avisarlas. Pero no se dónde están.
-Yo
te llevo-le digo. Me quede mirándola mientras se ponía las botas y metía sus cosas en el bolso. Creo que
mis sentimientos hacia ella habían crecido durante este tiempo. Me he comportado
como un estúpido al besarla.
-¿Qué
miras?-me dice y me mira de reojo.
-Pues
nada. Solo estaba pensando-soy un mentiroso le estaba mirando a ella.
-Mmmh
claro-me dice y se dirige hacia la puerta y la abre.
-¿Has
dormido bien?-le pregunto
-Sí y no vuelvas a meterte en mis sueños.
-Yo
no me he metido en tus sueños-le digo.
-¿Qué?
Entonces si no has sido tú fue…-la noto asustada.
-Que
era broma, boba-le digo y la rodeo con mi brazo.
-Menudo
susto me has pegado idiota. Y no te acerques a mí-me dice y me empuja.
No hay comentarios:
Publicar un comentario